Te viste lento.

Cuanto tiempo, disfrutamos de este amor…

Esta bien, se que fue mi error una vez más, lo lamento, ¿esta bien?.

Siempre e sido partidario de la idea que si quieres algo que no tienes y lo deseas fervientemente, a cada momento, terminara por volverse realidad, claro con sus pequeñas excepciones que no diré en estos momentos. Por mas de una vez eh regresado pensando en ti, por mas de una vez quise que estuvieras a mi llegada como en fechas anteriores, ó, en su defecto que llegaras justo detrás de mi. Según mis teorías, esto debe cumplirse ya, pero dios tiene caminos misteriosos, muy misteriosos.

Debí estar como siempre con la vista hacía todos lados, pero ahora en verdad me vi lento, lo suficiente como para darme de golpes en la pared. Desde el primer día en que me sonreíste, supe que nuestro destino debe ser estar juntos. Quizá, quizá… o ¿es que siempre me equivocó?,  no se que es lo que me pasa, que si hay tantos peces en el mar, porque siempre pesco el que no me deja nada… hahaha, es muy buena esa rola. Bueno, bueno,  juro que haré lo que este en mi para que estemos juntos y bien.

Que podamos caminar por la ciudad de noche, que comamos a la luz de una vela desgastada insertada por la boca de una botella de vino con el cuello chorreado de parafina… Tomado de tu dulce cuello, escuchando de tu boca el trueno que eriza mi cuerpo entero, que suda como vela ardiendo, conquistar tu cuerpo bello, construir una ciudad en tu cabello, arar con mis dientes tus labios, cultivar mi nombre en tu lengua.       Cuando creo que te conquiste, basta con descansar mi cabeza en tu pecho que se levanta como un cisne al mar.       Espera al amanecer, espera y descansa, descansa junto de mi, esperando nunca abrir los ojos, que algún día encuentren nuestros cuerpos hechos uno solo….