Esta mañana es diferente, mis sentidos parecían estar más activos que de costumbre, como si pudiera escuchar muchas cosas más de lo normal, ver y oler cosas distintas...
De hecho, el olor que me despertó fue el de un perfume peculiar, quizá solo en mi imaginación, pero pienso que pudo pasar.
En estos días la confusión es y parece que será menester a cada momento.
Como si nada fuera suficiente, la vida me pone cosas en mi frente como una charola con la más suculentas repostería y como sí todo tuviera mi nombre me lo pone frente mi mesa, se que podría comer todo, quizá no de una vez, pero poquito a poquito, como si de un filetito de 800 gramos se tratara, para después no dejar nada. Las ganas no las puedo contener, de probar, saborear, tan fina confitería.
De final no se que suceda, me entretuve mirando una película....
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